Ángel Alvarado: El bolívar murió y el petro nació sin vida por ser ilegal
Mar 26, 2018 3:12 pm
Para el economista Ángel Alvarado el anuncio realizado por el jefe de estado Nicolás Maduro de llevar a cabo una reconversión monetaria en Venezuela a partir del próximo lunes 4 de junio, y la eliminación de tres ceros a la moneda, es una medida superficial y que aniquiló la moneda de curso legal del país.
“El bolívar es una moneda que ha muerto, que no tiene ningún valor, su valor es prácticamente cero, y el problema de fondo es que los venezolanos necesitan una moneda la cual puedan intercambiar. Ocurre en un proceso hiperinflacionario que estamos viviendo, que la moneda desaparece, la moneda se destruye, y nadie quiere hacer transacciones en esa moneda” dijo.
Alvarado se refirió a que en estados como Táchira se hacen transacciones en dólares, y que hay tiendas por departamentos donde se hacen transacciones en moneda extranjera. Igualmente recordó que los colectivos del 23 de enero poseen su divisa como el panal, y que el gobierno está tratando de tener una moneda nueva como el petro, es decir, “el bolívar murió”, agregó.
Añadió que el sistema monetario funciona en base a la constancia y la credibilidad, la cual a su juicio no la tiene el petro, ni ninguno de sus atributos.
“Quitarle tres ceros al bolívar es un mero maquillaje, un cadáver, eso no sirve para nada sino para terminar de enterrar esa moneda. El petro nació muerto, por ser ilegal, emisión de deuda no aprobado por la Asamblea (Nacional), una moneda de curso legal distinta al Bolívar sin reforma de la constitución, la única moneda de curso legal es el Bolívar, y en tercer lugar enajena las reservas, es decir, coloca las reservas petroleras venezolanas como garantía de algo, lo que está taxativamente prohibido en la Constitución”, enfatizó
El también diputado a la Asamblea Nacional consideró que debido a la velocidad con la que suben los precios “no hay manera de adaptar el cono monetario”. Según su análisis, cada seis meses habría que agregarle un cero a los costos. Señaló que pasa solventar el “caos” económico del país es necesaria una reforma monetaria, con nuevas autoridades del Banco Central de Venezuela,
que dejen de financiar al gobierno, especialmente a PDVSA, y una nueva gerencia en la estatal petrolera, además de atraer inversión extranjera a la industria del oro negro, y por último levantar el control cambiario.
“El gobierno ha sido sumamente incapaz en aplicar estas transformaciones, esta sustitución de moneda, y quien nos asegura que en el mes de junio sea capaz de aplicar esta reconversión monetaria, nadie asegura esto, esto es una medida en mi opinión meramente distractiva, aquí en el fondo no va a haber una reconversión monetaria, porque no hay manera de aplicar esto, es una manera de mantener distraído a los venezolanos, desocupados del problema fundamental que tenemos en este momento. Nosotros tenemos una economía que está colapsando, no hay luz, no hay agua, no hay servicios, no hay dinero para las transacciones menudas, la hiperinflación, el hambre, todos son factores de una economía que está colapsando”, puntualizó.
Con respecto al sistema financiero de Venezuela lo calificó de “vulnerable”, explica que la banca presta a una tasa de 30 por ciento anual ejemplificando la tarjeta de crédito, pero con una inflación de 6.000 por ciento que asegura son los costos asociados, lo que manifiesta como un rendimiento negativo que viene según su opinión desde hace muchos años.
“La banca viene perdiendo dinero constantemente y se ha venido descapitalizando, en este momento los bancos hacen una esfuerzo por mantenerse como hacen todas las empresas en este país. Por eso no hay suficiente inversión en el sistema de pago, que además está sobrecargado porque al no haber billetes, el estacionamiento hay que pagarlo con tarjeta de débito o de crédito, un café que habría que pagarlo con un billete de baja denominación hay que pagarlo con tarjeta, entonces tienes un sistema sobrecargado en las operaciones, en una operación que cada vez es menos rentable”, argumentó.
Alvarado estima para final de año una inflación que podría cerrar por encima de 100 mil por ciento, y para mediados de año 40 mil por ciento, si se mantiene la tendencia que se ha venido llevando a cabo durante los dos primeros meses del año, de 80 por ciento, comentó.
En cuanto al aumento de la gasolina considera que debe aumentarse pero en el marco de otras medidas. Propone que hay que buscar otras fuentes de financiamiento para resolver la “grave” crisis fiscal.
Con respecto al pago de impuestos, dijo que el retraso que impone el Seniat “ya ese dinero vale la mitad, ese dinero se generó en el año 2017”. Manifestó que en parte del colapso del Estado el primer perdedor de la hiperinflación normalmente es el Seniat.