Luis Vicente Leon @luisvicenteleon
No hay ningún responsable individual por generación de sobre expectativas con el diálogo. Es un tema generalizado en el liderazgo político.
Entiendo que los líderes deben generar los estímulos para la participación política de sus seguidores, aunque eso puede ser un boomerang.
La sobreexpectativa es general. Los duros creen en una solución tipo marcha épica y los moderados en resultados inmediatos del diálogo.
Hay un problema básico en ambos planteamientos: desestimar la importancia de la integración, la participación conjunta y el tiempo.
En los procesos de transición, nada es rápido, ni inmediato, ni fácil. Y normalmente exige el esfuerzo de todas las tendencias políticas.
No se puede perder de vista que el problema no es la oposición, más allá de cometer errores, a veces naturales. Es el abuso de poder oficial
Es normal también que el camino a la solución esté lleno de tensiones internas en todos los lados. Lo inteligente es aprender haciendo.
Más allá del desánimo que genera la imposibilidad de resolver rápido el problema, se equivocan quienes creen que la opo abandonará su lucha.
Los estímulos para el cambio estarán vigentes siempre que se mantiene la violación del derecho a manifestar el deseo de las mayorías.
Es injusto personalizar la responsabilidad de los problemas de la oposición, como no sea en quienes bloquean las soluciones constitucionales
Podemos estar o no de acuerdo con las posiciones radicales o moderadas de los líderes y los partidos. Pero todos son relevantes en el cambio
El cambio en Venezuela inició. No es proyectaba el tiempo, ni la forma, ni los actores claves, pero si el resultado final.
80% de la pob quiere cambio inmediato. Obviamente sobredimensiona expectativas pero hay algo claro: buscará el cambio hoy y mañana también.
Pese a las dificultades y bloqueadores los líderes opositores han crecido y fortalecido posiciones de respaldo popular
Las evaluaciones de gestión de los cuatro líderes opositores con respaldo significativo se ubican por encima de 50%.
La diferencia entre la evaluación de gestión de los 4 líderes opositores (Capriles, López, Falcon y Ramos) y el presidente es de 30 puntos.
Capriles subió 14 puntos porcentuales en el último semestre colocándose en primera posición junto a Leopoldo López.
Leopoldo López mantiene su respaldo individual y de solidaridad primaria quedando empatado con Capriles en primera posición de voto nacional
Henry Falcón y Henry Ramos se ubican ambos en segunda posición de voto nacional, una situación nueva para la politica nacional.
Henry Ramos ha sido el fenómeno de repotenciación de liderazgo, metiéndose en el grupo de liderazgo representativo opositor.