La economía se desangra por la frontera
 [FONT="]	 	El diferencial cambiario entre Colombia y Venezuela impulsa el contrabando de extracción 	
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	         	 		21/09/2014 08:10:00 a.m. 		| 		Rafael Hernández .- 	
Dos mil millones de dólares es la cifra que estima en pérdidas  anuales por contrabando de extracción el ministro del Poder Popular para  Petróleo y Minería, Asdrúbal Chávez.
Si dicha cifra se reconvierte en bolívares, 
según el precio del mercado negro actualmente (Bs 97/$), se obtendría la magnitud de moneda venezolana que  fluye a través de la frontera colombo - venezolana (cifra de doce  dígitos) y que está involucrada en el negocio del contrabando.
Todo ello sucede en virtud de la brecha que existe entre la moneda venezolana y la colombiana.
La mafia del cambio.
 Juan Carlos Tanus,  director de la Asociación de Colombianos y Colombianas en Venezuela,  elaboró un informe en el que explica esta perversión cambiaria.
 “Detrás  de las casas de cambio colombianas en la frontera hay mafias que  controlan el precio del bolívar, disminuyen o aumentan su valor  dependiendo del costo de transporte y de la mercancía para que al final  siempre inviertan el mismo capital. Funciona así: si por ejemplo  contrabandean una tonelada de arroz que les cuesta 209 mil pesos  colombianos (Bs 9.500 a 22 pesos por bolívar) y tienen que pagar 50 mil  pesos en sobornos y alcabalas, al finalizar les quedan 159 mil pesos.  Así establecen que el precio del bolívar disminuirá de 22 a 16,7 pesos  por moneda venezolana para que, al reconvertir la inversión, vuelvan a  tener los Bs 9.500 iniciales de inversión”.
“Es falso que el  régimen cambiario en la frontera esté determinado por la oferta y la  demanda. Además, el Estado colombiano está permeado por el proceso del  contrabando. Es inconcebible que se maneje tanto dinero sin la banca.
 ¿Por qué no detienen el contrabando? Porque  para el Gobierno (colombiano) le es más económico mantener esa cultura.  El ministro de Interior y Justicia neogranadino, Juan Fernando Cristo,  es del departamento Norte de Santander, y los votos que Juan Manuel  Santos obtuvo para ganarle a Iván Zuluaga (elecciones presidenciales de  Colombia en 2014) vienen de los estados fronterizos, en apoyo a Cristo,  que a su vez son los votos de los pimpineros y contrabandistas”, asevera  Tanus.
Aseguró que 
toda la mercancía con origen en el contrabando que se incauta en suelo colombiano no es devuelta al país del que proviene; incluso es regresada a las mafias que la ingresa.
El costo es político. El  presidente Juan Manuel Santos obtuvo la presidencia colombiana con  7.816.986 votos y resultó vencedor en 16 departamentos (estados)  fronterizos, de un total de 32 divisiones departamentales.
Últimas Noticias  constató que la policía colombiana y los funcionarios de la aduana se  hacen de la vista gorda con los contrabandistas y pimpineros desde el  primer metro de suelo colombiano que colinda con Venezuela.
“El  Gobierno colombiano maneja las relaciones con Venezuela de una manera  hipócrita; lo que se ha detenido realmente en Colombia es nada, muy  poco. Hay un gobierno comprometido con el tráfico y el contrabando. La  lucha allá es mantener el poder a través de lo económico”, concluye el  director de la Asociación de Colombianos en Venezuela.
El régimen  oficial cambiario en Colombia (Banco Central de Colombia) atribuye  1.979,97 pesos por dólar y 169,16 pesos colombianos por bolívar, según  su reporte de septiembre (fluctúa mensualmente). Por su parte, el  sistema cambiario venezolano establece un precio de Bs 0,00316 por cada  peso colombiano y de Bs 6,30 por US$ (cifra del Centro Nacional de  Comercio Exterior [Cencoex]). Sin embargo, el cambio en la frontera alcanzó en septiembre entre 22 y 24 pesos por bolívar.
El cambio artificial. El economista y abogado colombiano, experto en el tema fronterizo,
 Daniel Libreros Caicedo,  explica que la
 “perversión cambiaria tan pronunciada sucede por  especulación, porque las casas de cambio fronterizas establecen una hinchazón artificial que les permite capturar más ganancia  por contrabando. La Superintendencia Financiera de Colombia debería  regular esta práctica, pero al ser un mercado no visible, aunado al peso  político y económico de estas mafias, es muy difícil controlarla”.
No obstante, la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales de Colombia (Dian)
 tiene más de 300 casas de cambio en Cúcuta registradas  en su base de datos, constituidas legalmente y que operan bajo dicho  régimen cambiario no oficial. Fueron consultadas 20 de estas empresas,  entre las que destacan: InterMoney Cambios, Mekacambio, Cambios Ulher,  Cambio Barbosa, entre otras. Ninguna declaró.
Libreros explica que un tercio de la población del vecino país 
está vinculado en alguna manera con el contrabando y sus efectos,  por formar parte del negocio, consumir mercancía con este origen,  distribuirla o almacenarla. 
Sostiene que la tasa de desempleo oficial es  de 9%, y que la cifra incluye personas que trabajan por su cuenta por  lo que sugiere que la cifra real sería el doble (18%).
“La  contracción industrial originada por los Tratados de Libre Comercio ha  desencadenado que las importaciones aumenten, eso manda a 
mucha gente al desempleo y su subsistencia  está en el contrabando, tanto en la vía de informalidad comercial como  en la compra de productos que provienen de ahí”, concluye Libreros.
El contrabando en digital. La  principal fuente difusora del precio al que se está negociando el dólar  negro en las calles es el portal Dolartoday.com, que solo toma en  cuenta el monto que se maneja en Cúcuta.
Últimas Noticias constató que se debe llamar a dos números, uno local (en Cúcuta) y otro móvil (venezolano), donde se corrobora
 la tasa que se cobrará cada día.  
Así lo confirmó el dueño de una casa de cambio en Ureña bajo anonimato.  En ambos números, para el 16 de septiembre se dictó un monto de 20  pesos para la compra y 22 para la venta por cada bolívar. En el portal  DolarToday la cifra era de 21,5. Dichos montos están intrínsecamente relacionados con el precio del dólar del mercado negro; su valor disminuye o aumenta con equivalencia a ese precio.
José María González,  director de Asocambios, gremio establecido en Cúcuta, agregó que “es  difícil para las personas que no están en el (negocio) diario entender  las transacciones, la tasa se fija de acuerdo al precio del dólar  paralelo en Venezuela”.
Al ser consultado sobre cuántos bolívares se negocian en la zona de operaciones de Asocambios, 
declaró que no tenía conocimiento. ¿Cómo saben cuánto es la demanda y la oferta? No hubo respuesta.
Por  otra parte, el economista venezolano Ronald Balza señala que: “En esa  página web (DolarToday) se publican tres tipos de cambio distintos: el  cambio oficial de Sicad 2 a Bs 49,98 / US$, el cambio de dólar implícito  con una denominación de Bs 74,80 / US$ y el dólar Cúcuta de Bs 94,74 /  US$ (para el 17 de septiembre). El dólar implícito debería ser el techo, nunca debería ser superado  por la divisa ilegal del mercado negro, porque dicho monto es el  resultado de dividir la liquidez monetaria (activos que posee la nación,  susceptibles de convertirse en dinero efectivo sin perder su valor) de  la República entre las reservas internacionales, es decir, la cantidad  absoluta de dólares que pudieras comprar con bolívares”.
“Esta perversión cambiaria pasa porque a mayor cantidad de bolívares recibidos por dólar, 
más mercancía de contrabando e ilegal puedes comprar.  Se explica así: si por un dólar (en Cúcuta) pagan 90 bolívares en la  transacción delictiva, se cruza la frontera, con ese monto se adquieren  ilícitamente 927 litros de gasolina a Bs 0,097 cada uno. Se extrae esa  gasolina a Colombia, se negocia a 3 dólares en promedio por litro, la  ganancia final sería de US$ 2.781. En resumen, con un dólar vendido a Bs  90, se obtienen ilegítimamente Bs 250.290”, dijo Balza.
En definitiva, explica el economista venezolano, el contrabando
 termina siendo un negocio vinculado con el régimen cambiario ilegal y arbitrario impuesto en la frontera.
Dicha  distorsión, explica Balza, se reduciría al aumentar las reservas  internacionales venezolanas y la liquidez monetaria, ya que disminuiría  el monto del dólar implícito y este a su vez reduciría la brecha entre la moneda legal y la ilegal.
Sin  embargo, señala que “las legislaciones cambiarias en Venezuela no  tienen poder sobre el comportamiento de las divisas en la calle. No  tienen impacto para evitar el debilitamiento del bolívar, ya que el  mercado informal, ilegal y fronterizo se rige por otra dinámica”.
“Hay un costo político de tomar medidas,  pero hay un costo aún mayor de no implementarlas”, se refiere Balza a  la disminución de aportes que hace el BCV al Fonden:
 ingresos que la  nación recibe como producto de las exportaciones del petróleo para ser  destinadas a inversión social. De esta manera aumentarían las reservas  venezolanas. “Dicha medida generaría un fuerte impacto en la población, pero podrían ser tomadas en cuenta para implementarse eventualmente”, concluye el economista.
Últimas Noticias  verificó que el precio del dólar paralelo es establecido por mafias  fronterizas y también es equivalente a la magnitud del contrabando de  combustible y alimentos que llega a Colombia.